Gemma y Roger se casaron en Menorca unos años antes. Yo fui su fotógrafa de boda -puedes echar un ojo a su boda aquí– y desde ese día no nos habíamos visto nunca, pero había una buena relación. Un día Roger me escribió para decirme que Gemma estaba embarazada y que querían hacerse unas cuantas fotos especiales de su embarazo para recordar ese momento tan especial en su vida. Ni que decir cabe que les dije que si encantada y me fui a su piso de Barcelona para que el ambiente fuese más íntimo y que ellos estuviesen relajados.
Pasamos la tarde aprovechando los rincones de su casa y disfrutando del reencuentro. El resultado fueron estas fotografías íntimas y naturales. Sin posados muy forzados y mostrando el embarazo de Gemma tal y como ella quiso hacerlo.